Mucho se ha escrito en las últimas dos décadas sobre el coaching. Muchos autores y escuelas de distintas corrientes han capitalizado el interés de millones de seres dotados con buena capacidad comunicativa y personalidades orientadas a la colaboración, la dirección, la acción, el cumplimiento de metas, el respeto y la paciencia. El interés generalizado que despertó esta nueva práctica, ciertamente atrajo a muchas personas, convirtiendo al coaching en una nueva profesión.
El coaching ha sido definido en términos generales como un proceso dinámico e interactivo que consiste en asistir a otros en el logro de sus metas y en el desarrollo de su propio potencial.
En cuanto a su práctica en las empresas, ha sido definido como una forma inteligente, sensible y metódica de apoyar a las empresas y sus colaboradores para que mejoren los resultados. El coaching empresarial generalmente persigue generar un proceso de transición de una situación actual a una nueva situación futura deseable y se caracteriza porque se establece una comunicación de doble vía entre el líder y los miembros de su equipo, entre los distintos miembros del equipo y entre estos últimos y el líder, que está dirigida a facilitar el logro de los objetivos de la empresa.
La International Association of Coaching establece, además, que el coaching tiene como fin apoyar al individuo, organización o equipo a que se produzca un resultado deseado, gracias a la co-creación y solución de los problemas.
¿Cuál es entonces la función de un coach en el ambiente empresarial? Pues, promover la participación de los miembros del equipo para el establecimiento de los objetivos; involucrarse en la solución de los problemas de desempeño de los miembros de su equipo; impulsar la motivación para darle nueva dirección en su trabajo a quien la necesita y; prestar atención a las observaciones que hacen los miembros de su equipo a la forma como él o ella ejerce su liderazgo.
Otras pregunta relevante respecto a este tema es, ¿cuántos tipos de coaching hay? La lista es larga y extensa. En el artículo de Wikipedia sobre coaching aparecen mencionadas alrededor de una decena y media de tipos de coaching. Por razones prácticas, en VNS preferimos simplificar el asunto y reducir el tamaño de la lista a 4 tipos: el coaching personal y 3 tipos de coaching para las empresas: coaching organizacional, en proyectos y ejecutivo.
El coaching organizacional trabaja con la identidad, realidad, diseño de futuro, cultura, valores y el comportamiento en general de la organización.
El coaching en proyectos se encarga de brindar orientación al gerente-líder y los miembros de su equipo para el éxito del proyecto y garantizar la satisfacción del usuario y las personas involucradas.
Por último, el coaching ejecutivo se enfoca en el aprendizaje de nuevas conductas más efectivas dirigidas a alcanzar las metas organizacionales y personales del ejecutivo.
En tiempos de cambio, el coaching ofrece los siguientes beneficios:
· Brinda un espacio de confidencialidad y confianza, donde tratar temas que no sería posible tratar en otros contextos
· Aporta una visión externa y objetiva que facilita el proceso de definir la situación actual y los objetivos clave
· Conduce a la innovación, ya que mediante la aplicación de su metodología permite identificar nuestros recursos, explorar opciones y cambiar hábitos
· Permite aprovechar la energía emocional de forma positiva, transformando la queja en entusiasmo y compromiso
· Ayuda a mejorar los sistemas de gestión personal, en particular los aspectos relacionados con el manejo del tiempo y del estrés, lo cual produce mayor eficacia
En una próxima entrega en este blog, compartiremos la metodología y el modelo de coaching que desarrollamos en Valuenet Servicios. Esperamos les sea útil y aporte beneficios.
Mientras tanto, pueden dejarnos sus comentarios por el vínculo https://www.linkedin.com/in/jose-luis-lairet-9874925/
José Luis Lairet
Director
05/02/2022
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