Hay dos únicas emociones básicas que somos capaces de producir en la vida: amor y cualquier otra que identifiquemos como como su opuesto, por ejemplo el odio.
Independientemente del nombre que demos a esas emociones básicas, el amor y su opuesto son realmente dos aspectos de una misma energía, la emoción. La emoción es la fuente de potencia que nos mueve en la vida. El amor o el miedo son las fuerzas que nos impulsan en la vida y ellas nos acercan o nos alejan del cumplimiento de nuestros sueños.
Muy a menudo somos testigos del caos y el drama que acompañan la existencia de aquellas personas que conducen sus vidas desde las emociones.
* Basado en el material producido por María Montero para su taller 4 Alas para Volar. María Montero es investigadora, facilitadora y coach.
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